martes, 8 de julio de 2014

Percucyl, trampolín para los percusionistas segovianos del mañana. Entrevista a Rodrigo Martínez

Entrevista por cortesía de Histéricas Grabaciones

PERCUCYL

Percucyl es un curso de percusión que se viene organizando desde hace tres años en El Espinar. El curso está dirigido a alumnos de Enseñanzas Elementales, Profesionales y Grado Superior, tanto de conservatorios como de escuelas de música.


En el curso se persigue reforzar la actividad habitual de clase durante el curso a través del trabajo de ensemble, y el conocimiento de otros profesores y compañeros procedentes de toda la geografía española.



La organización corre a cargo de Rodrigo Martínez (profesor del Conservatorio de Segovia) y José Antonio Caballero (profesor del Conservatorio de Salamanca).




En esta edición 2014, contarán también con Alejandro Sancho (Conservatorio de Salamanca), Rafael Gálvez (Orquesta Nacional de España) y como invitados especiales Nick Woud (Royal Concertgebow Orchestra), Ramon Lormans (Conservatorium van Amsterdam) y Vincent Houdijk(Percusionista Freelance multidisciplinar).

El concierto del día 17 de Julio en el Jardín del Mudo, dentro del programa de Festival Jóven del Festival Segovia 2014, será interpretado por alumnos de la presente edición del curso procedentes de la provincia de Segovia. Todos los alumnos participantes estudian actualmente los últimos cursos de Enseñanzas Profesionales en Segovia y Salamanca y Grado Superior en los conservatorios de Madrid y Salamanca. Interpretarán parte de las piezas de grupo y solistas trabajadas durante el curso. La música es prácticamente en su totalidad original para grupo de percusión.


LA ENTREVISTA

¿Cómo y por qué surge la idea de crear PERCUCYL? ¿Por qué Percusión y no otro tipos de instrumentos?
Percucyl nace básicamente por la inquietud de José Antonio Caballero y Rodrigo Martínez (yo mismo) de ampliar la formación de nuestros alumnos, ayudándoles a conocer a compañeros de otras provincias y otros profesores, y también para que durante el verano tuvieran la oportunidad seguir tocando la percusión, en este caso, de manera intensiva durante una semana. Hemos escogido la percusión porque es nuestra especialidad instrumental. En un futuro, cuando estemos consolidados no descartamos abrir el curso a otras especialidades.

¿Quiénes pueden inscribirse a un curso de estas características? ¿Cómo pueden hacerlo y dónde estáis ubicados?
El alumnado que se inscribe al curso va desde alumnos de Conservatorios hasta Escuelas de Música. Es necesario estar cursando estudios de percusión, ya que la base es perfeccionar su trabajo durante el año. Las edades van desde los 9 a los 32 años. En esta edición contamos hasta con profesores entre nuestro alumnado. La inscripción se hace enviando un correo a percucyl@gmail.com y nosotros les enviamos la inscripción para que puedan formalizarla. Aunque la sede de nuestra asociación está en Salamanca, la actividad principal se desarrolla en El Espinar.


La organización y el profesorado sois músicos profesionales nacionales e internacionales ¿Cómo es ser músico profesional? ¿Cuántas horas diarias se pueden llegar a dedicar al estudio de la percusión? ¿Cuál es el panorama actual para un músico de percusión?
Ser músico profesional es sencillamente hacer de la música tu modo de vida. Todavía a día de hoy se ve como algo utópico, pero hay mucha gente que vivimos de ello, ya sea dando conciertos, clases, recitales o varias cosas a la vez. El estudio de la percusión, si se hace de una manera racional, puede hacerse casi ilimitado; casi hasta que el cuerpo aguante. Durante la época de estudiante superior se puede llegar fácilmente a las 7 u 8 horas de práctica diaria, aunque en la vida profesional, exceptuando ensayos, se está en torno a las tres horas. Respecto al panorama actual, las posibilidades son inmensas. Solamente imaginar que la cantidad de instrumentos de percusión existentes es casi infinita, se puede empezar con una formación clásica y ampliar horizontes hacia el mundo de la batería, la percusión étnica y/o tradicional, y dentro de cada una de estas opciones, también se pueden encontrar cientos de posibilidades. La clave está en trabajar mucho y siempre con la mente abierta para adaptarse al entorno y las necesidades. Con todos estos ingredientes, creo que casi cualquier percusionista de calidad puede ganarse la vida sin grandes problemas.

A parte de una excelente técnica y posición ¿qué tiene un músico excelente sobre el escenario?
Capacidad de concentración por un lado, y por otro, ser capaz de transmitir todo lo que la música le hace sentir. Lo primero es entender lo que se toca y luego tratar de hacer llegar al público algo que les provoque sensaciones, emociones, sean del tipo que sean. Lo más importante es la capacidad de expresar.


En más de una ocasión oímos que el instrumento es un órgano más del músico ¿qué piensas al respecto?
El músico no debe olvidar nunca que el instrumento es algo que te sirve como herramienta, pero como en todo, cuando esa herramienta se convierte en una extensión de tu cuerpo, todo resulta mucho más fácil. Esas horas de práctica de las que hablábamos antes, unidas a la sensación de que el instrumento es una parte de ti, hacen que esa capacidad de transmitir sea mucho mayor.

¿Cómo se transmite sin hablar con palabras en un concierto?
La propia música en sí ya implica muchas cosas. Hay quien defiende que cuando las palabras se acaban, entonces está la música. Muchas personas con problemas para relacionarse con los demás han encontrado en la música la manera de expresar sus emociones. Además de la propia expresión música, la gestualidad, tanto de la cara como de todo nuestro cuerpo, nos ayudan a crear un todo que transmite aquello que queremos que el público sienta.


¿Hay diferencias entre un músico profesional dedicado a la música clásica y un músico profesional dedicado a la música ligera?
Esta pregunta tiene un poco de trampa. La diferencia está en el tipo de música que se hace, que requieres algunas habilidades diferentes. Pero después de todo, te das cuenta de que, a una música o a otra los dos han dedicado una parte importante de su vida.

En muchas ocasiones se echa en falta la presencia de público joven en los auditorios ¿Por qué ocurre esto? ¿Qué se puede hacer?
Hasta hace poco tiempo la música “clásica” (lo pongo entre comillas porque no es un término del todo correcto) parecía estar reservada sólo para gente de ciertas edades. Hoy día la cosa está cambiando, y bastante más de lo que parece a simple vista. Los promotores de este tipo de conciertos se están adaptando bastante bien a las circunstancias actuales, lo cual está haciendo que cada vez se anime más un público joven. Cierto es que nada tiene que ver España con otros países europeos. Hoy en día puedes suscribirte a los conciertos de la Filarmónica de Berlín desde tu casa y verlos en directo desde tu sofá a través de Internet (todo legal, claro). Ser mucho más pedagógicos, explicando lo que hacemos y adecuando los repertorios, se puede llegar a público de todas las edades. También, la proliferación de conciertos didácticos ha contribuido notablemente a bajar la media de edad entre nuestro público.


¿Puedes contarnos alguna anécdota en algún concierto? ¿Cuál es el sitio más exótico donde habéis actuado?
Anécdotas hay miles. Resumiendo, de las peores que te pueden pasar es que, en el mundo de la música todos nos conocemos y al final te encuentras con todo el mundo una y mil veces. La movilidad de los músicos es muy grande y te puede pasar perfectamente que toques en una orquesta y la siguiente temporada en otra diferente. En tu último concierto con la orquesta A tienes un mal rollo con el director y, como es tu último concierto con ellos, te creces y le dices cuatro cosas. Comienzas tu temporada con la orquesta B y cuando llegas a tu primer ensayo todo ilusionado te das cuenta de que el director es el mismo que en tu último concierto con la otra orquesta. Hablando en términos coloquiales, eso es un marrón como un piano. Como sitios exóticos, también hay muchos, pero quizás uno de los que más nos ha llamado la atención fue tocar hace ya muchos años en las ruinas de Clunia, en Burgos o la Mezquita de Córdoba. A parte, en conciertos pequeños, cada uno hemos hecho casi de todo, por lo que cada uno tenemos nuestro propio recuerdo y daría casi para un libro.

¿Cuáles son vuestros planes para el resto del 2014 y comienzos del 2015? ¿Algún concierto importante? ¿Festivales? ¿Salidas al extranjero? ¿Alguna grabación, quizás?
Nuestra actividad principal se centra en nuestras clases, por lo que el proyecto principal está en conseguir que la mayor cantidad de alumnos posibles toquen lo mejor posible. A parte de eso, por supuesto, conseguir llevar adelante la 5ª edición de Percucyl. Es algo que hacemos con mucha ilusión y esperamos consolidarlo. Por supuesto, seguiremos haciendo conciertos, tanto con la Orquesta Sinfónica de Castilla y León, como algunos conciertos de cámara, solistas y cada uno con distintas agrupaciones. No descartamos en un futuro también crear una especie de encuentro de invierno basado en Percucyl para los alumnos más mayores. Quién sabe. El día a día nos irá diciendo.


¿Creéis que el mundo digital va a acabar con el mundo de la música tal y como lo conocemos hoy en día? ¿Cuál crees que es el futuro del músico?
En absoluto. Precisamente, una buena sinergia con el mundo digital es la clave del futuro. A día de hoy, ningún aparato electrónico ha conseguido suplir al músico. Es como cuando compras algo hecho a mano, artesanal; siempre tiene un acabado especial y se suele considerar un producto de lujo. El músico no deja de ser un artesano. Precisamente, hoy que es tan fácil descargarse música de cualquier sitio, el público valora mucho más esos buenos músicos con buenos directos porque, lo que vives en un concierto jamás te lo podrá dar un disco. Nuestro camino debería ir hacia la utilización de los medios digitales para difundir nuestra labor y así hacerla llegar mucho mejor a la gente. El músico cumple una especie de función social y creo que ahí es donde radica nuestro futuro; en hacer sentir a las personas sensaciones especiales. Por ejemplo: acudir a un buen concierto después de una dura semana de trabajo puede ser una de las mejores maneras de relajar la mente y conectar con otro yo diferente.

¿Cuál ha sido vuestro mejor momento / recuerdo en la música?
Cualquier buen concierto es un momento impresionante. Siempre hay que hacer que cada concierto sea especial. Hemos de decir que, cada año al acabar Percucyl la sensación es muy especial. El concierto del último día es como un resumen de todo lo vivido. La expresiones de gratitud de los alumnos son como aquello del anuncio de que para todos lo demás… (no es plan de hacer publicidad). Cuando uno toca se sienten cosas muy especiales, pero cuando un alumno toca un buen concierto, es casi indescriptible. Yo me quedo con la alegría que se siente cuando un alumno consigue un buen resultado.




PERCUCYL 2012
Topsy Turvy / Nathan Daughtrey


MISCELÁNEA

¿Podríais decirnos…
Aquí hablaré por mí, porque mis compañeros tendrán sus propias preferencias.

...un libro?:
Ensayo sobre la ceguera.

...una película?:
El show de Truman.

...una obra?:
4ª sinfonía de Mahler.

...un álbum?:
Nevermind.

...un solista?:
Josep María Colom.

...una afición?:

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